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Si alguna vez ha tenido que cuidar a una persona enferma, anciana o discapacitada, sabe que puede ser difícil tanto financiera como emocionalmente. Un estudio reciente encontró que muchos cuidadores se ven obligados a hacer sacrificios financieros, incluido el retraso de la jubilación, para ayudar a sus seres queridos.

Afortunadamente, hay tres exenciones de impuestos federales clave disponibles para ayudar a aligerar la carga financiera de los cuidadores. Aquí hay algunos consejos para ayudar a aprovecharlos:

Consejo #1: Use el crédito “familiar”

Este es un crédito fiscal de $500 que puede reclamar por cada dependiente que no sean niños menores de 17 años. Este crédito es generalmente para familiares y otras personas que son miembros de su hogar y para quienes usted proporciona más de la mitad de su manutención. El crédito comienza a reducirse gradualmente a $400,000 para contribuyentes casados conjuntos y $200,000 para contribuyentes individuales.

Consejo #2: Use la deducción de gastos médicos

El cuidado a menudo viene con gastos médicos. La buena noticia es que puedes reclamar una deducción por los gastos médicos que pagas por tus dependientes.

El umbral para reclamar la deducción de gastos médicos es del 7,5 % para los años fiscales 2022 y 2023, lo que significa que puede deducir cualquier gasto médico superior al 7,5 % de su ingreso bruto ajustado.

Consejo adicional: aún puede reclamar la deducción por gastos médicos para un pariente, incluso si esa persona no se clasificaría de otra manera como dependiente (como cuando no vive en su hogar), siempre que proporcione más de 50 por ciento de su apoyo. En el caso de que varias personas juntas proporcionen más del 50 por ciento de la manutención de un pariente, pueden decidir colectivamente quién recibe la deducción como parte de un acuerdo de manutención múltiple. Esto es útil cuando, por ejemplo, los hermanos comparten el costo del cuidado de los padres ancianos.

Consejo #3: use el crédito por cuidado de niños y dependientes

Si trabaja mientras cuida a un dependiente, es posible que pueda usar el Crédito para el cuidado de menores y dependientes para compensar parte del costo de su cuidado. El dependiente debe ser física o mentalmente incapaz de cuidar de sí mismo y vivir en la misma casa que usted durante más de la mitad del año. Dependiendo de sus ingresos, el crédito se puede aplicar contra el 20 % al 35 % de los gastos calificados, hasta un crédito máximo total de entre $600 y $1,050 para un dependiente.

Consejo adicional: tanto usted como su cónyuge deben trabajar durante el año para reclamar este crédito. Si su empleador brindó alguna manutención a dependientes como parte de un paquete de beneficios, la cantidad del crédito se reduce en esa cantidad.

Si tiene alguna pregunta sobre los beneficios fiscales disponibles para usted, no dude en ponerse en contacto.

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