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Hacia el final del año, muchos se someten a una revisión anual de sus fondos de jubilación. Ciertamente fue un año difícil y una de las decisiones que enfrentan muchos padres y abuelos es la difícil decisión de ahorrar para la jubilación o usar los fondos para pagar la educación universitaria de sus hijos o nietos. Aquí hay algunos pensamientos sobre el asunto:

Priorizar la jubilación sobre la educación

En la mayoría de los casos, es más importante anteponer las necesidades financieras de la jubilación a la educación universitaria. Este es el por qué:

Los fondos de jubilación se utilizarán para cubrir sus necesidades básicas para la vida diaria hasta por 20, 30 o incluso 40 años. Si bien la educación de los niños es importante y costosa, es secundaria para su bienestar a largo plazo.

La ayuda financiera y muchos otros programas están disponibles para que su hijo los aproveche para ayudarlos a pagar la universidad. Esto incluye programas actuales y futuros de condonación de préstamos estudiantiles.

Si es necesario, su hijo puede solicitar préstamos para estudiantes. Si bien les puede llevar años pagar un préstamo estudiantil, tendrán un potencial de ingresos futuro para hacerlo. Sus ingresos serán más bajos o incluso se detendrán al jubilarse.

Maneras de planificar para ambos

Hay muchas oportunidades para financiar tanto la jubilación como la educación universitaria con ventajas impositivas. Considere financiar primero las necesidades básicas de jubilación, luego busque cuentas de ahorro educativas y programas relacionados. Aquí hay algunas sugerencias:

• Comience a ahorrar temprano. Use el tiempo para ayudar a aumentar el valor de sus cuentas de ahorro para la jubilación y la educación. Aproveche los programas de jubilación 401(k) proporcionados por el empleador o programas de jubilación similares, especialmente si hay una contribución equivalente del empleador. Después de eso, consulte las Cuentas de ahorro para la educación Coverdell y los planes de la Sección 529 para maximizar su potencial de ahorro para la educación.

• Investigar y solicitar subvenciones y becas. ¡Comience a investigar temprano, ya que hay becas universitarias disponibles para niños de hasta 5 años!

• Considere las universidades públicas del estado. Por lo general, son menos costosas que las universidades privadas o de otros estados. Si se prefiere una universidad fuera del estado, verifique si tienen acuerdos de reciprocidad con su estado de origen.

• Busca programas de estudio y trabajo. Muchas escuelas ofrecen trabajos de medio tiempo a los estudiantes para ayudarlos a pagar la escuela mientras se mantienen al día con sus estudios. Estos programas varían según las necesidades financieras del estudiante.

Tomar decisiones financieras como esta puede ser difícil, pero con la planificación y el conocimiento adecuados, a menudo se puede encontrar un camino que funcione para usted. Llame si desea discutir su situación específica.

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